Soy débil. Los acentos me matan y el venezolano ocupa, completito, mi top five.
Y bueno, como no puedo vivir sin escuchar esa tonadita, hace unos días me fui a Isla Margarita y acabo de volver.
Así estuve chicos: con 20 kg encima pero extremadamente feliz
Estábamos como chanchos, literal.
0 comentarios:
Publicar un comentario